¿En qué consiste esta reparación? Las células de la piel se dividen con mayor rapidez durante la noche. Como consecuencia, se regeneran mejor. Compensan así la pérdida de hidratación y el resultado es una piel con menos daños visibles.
Tratamientos más concentrados
Estas dos fases tan diferentes -día y noche- precisan cuidados y, por tanto, productos distintos. De día protegemos la piel y de noche la alimentamos. Así, durante el día recurriremos a cremas con una textura y composición más ligera. Su principal función será proteger la piel y mantenerla libre de toxinas. Por la noche, emplearemos cremas formuladas con ingredientes activos cuya principal misión sea la regeneración. Como las cremas de noche no necesitan filtros contra el sol ni complejos anti contaminación, pueden incorporar otros principios activos que revitalicen y reparen.
Gracias a esta reparación “extra” que nos proporcionan los tratamientos nocturnos, la piel se prepara para afrontar de mejor forma el día y ayudarnos a mostrar un rostro con un aspecto luminoso y menos fatigado.
Rutina nocturna
Lo primero antes de acostarse: limpiarse el rostro para eliminar los restos de maquillaje e impurezas del día. HD DETOXIFIER Agua Micelar, para pieles sensibles y/o pieles secas. HD DETOXIFIER Espuma para pieles mixtas o pieles grasa con tendencia acneica.
Una piel limpia asimila mejor los principios activos de los productos aplicados a continuación.
2º. HIDRATACIÓN
HD NOX+ Crema Noche es una crema formulada específicamente para uso nocturno. Es capaz de potenciar los mecanismos naturales de reparación gracias a la presencia de un Extracto de Euglena Gracilis, dermoactivador nocturno.
La combinación sinérgica de activos antioxidantes de alta potencia que incorpora en su fórmula -glutatión, ácido lipoico y superóxido dismutasa- ayuda a revertir los daños causados por el envejecimiento celular.
A veces asociamos las cremas nocturnas a edades avanzadas, pero esto es un error. El cuidado nocturno no tiene edad. Es más, conviene empezar pronto, durante la adolescencia, ya que la piel tiene ‘memoria’, tanto para lo malo como para lo bueno. Si la cuidamos y nos preocupamos de ella desde jóvenes, nos lo agradecerá y retrasará la aparición de los indeseados efectos visibles del envejecimiento cutáneo.